Hace poco, en otro sitio, le comentaba a una usuaria de este foro que uno de los problemas que tenemos los diabéticos tipo 1 es la incomprensión de la gente hacía nuestra situación. Y le comentaba que sería distinto si esta enfermedad se llamase, en vez de diabetes tipo uno, por ejemplo Tejodiosis.
Así, cundo nos preguntasen que en que consiste eso les explicaríamos que como nuestro páncreas no funciona tenemos que hacer nosotros su función de producir la insulina necesaria, pero solo la necesaria, es decir, calcular que cantidad de la misma necesitamos en cada momento del día, y que este cálculo no es fácil, pues depende de lo que comas, cuanto tiempo haya pasado desde la misma, del ejercicio que hagas o hayas hecho, del estress que tengas en ese momento, de las hormonas, de que si tengas un día más o menos tonto … y una vez calculado, digamos cada hora, te la inyectes con una jeringuilla … y claro, que esto con niños es muy complicado, pues saber todo eso en cuerpo ajeno … buff, y que además a esas edades todo ello varía a cada momento, y mucho. Y ojo, que si te equivocas en el cálculo puede tener consecuencias a largo plazo, en el caso de que lo hayas calculado por lo bajo, o a corto plazo, si te has pasado, pues por ejemplo, en este caso puedes llegar a sufrir incluso desvanecimientos y convulsiones. Entonces igual nos preguntarían si eso no es muy parecido a la diabetes, y entonces les diremos que en lo único que se parece es que estos, en algún caso, se tienen que inyectar insulina, pero en nada más, que realmente en su caso el páncreas si que calcula la insulina que tiene que producir pero que no siempre es capaz de generarla toda, y que por eso normalmente con una dieta que no obligue al páncreas a producir mucha insulina les batas, pero que en nuestro caso no, que hasta para ir al super tenemos que calcular cuanta necesitamos e inyectárnosla.
En fin que con este nuevo nombre de nuestra desgracia, la gente, al menos, nos miraría de otra forma, y no haría ese gesto que tanto nos jode como diciendo “Ah, diabetes, como mi suegro … bueno, que no pasa nada por no comer dulces, que lo mío si que es grave, que este lumbago me tiene matao” o esa frase tan graciosa “ah, diabetes, pues yo no te veo gordo”