A ver, María, vamos por partes.
-¿tu marido estaba raro y no se le ocurrió medirse la glucemia?
Yo le noté raro porque no participaba en la conversación, algo que tampoco me llamó excesivamente la atención en un primer momento. De habérselo notado él, se habría medido...Lo típico es "Me voy a medir, me siento raro" o, simplemente, "Me tomo un glucup, estoy bajo".
- ¿No se conoce esos síntomas?
Sí, se conoce los síntomas y además se los nota habitualmente; aunque existen hipoglucemias asintomáticas, no es nuestro caso, afortunadamente.
- ¿no siempre esos síntomas de estar como ausente se corresponden con bajadas?
Como te decía, yo le noté ausente de la conversación, pensé que estaba aburrido o que no le interesaba, sin más. Pero desde que le noté así hasta que me di cuenta de que no es que lo pareciera, sino que lo estaba, pasó poquísimo tiempo.
-¿te ha contado qué sentía en esos momentos o qué le pasó por la cabeza o por qué no podía decir nada?
Me dijo que pensó que qué fuerte era el viento que le pesaban las piernas.
Yo creo que el viento le confundió. No sé si habrás sentido una especie de "estar mareosa" cuando hace viento. Desde luego, ese tuvo que ser el motivo.
-¿por qué lleva bomba de insulina y no usa plumas? No sé cómo funciona una bomba, ni en qué casos es más o menos necesaria (entiendo que para alguna persona como niños, o personas que no puedan "controlar" será adecuada, pero, ¿para alguien responsable y con atención suficiente y capacidad de escucha y control de sus acciones, ¿por qué? (hago preguntas con intención no de juzgar, sino de comprender cosas que no conozco)
Mi marido ha sido de los que ha usado el medidor continuo durante muchos años, con plumas. y le iba de maravilla. Pero mi hija lleva bomba desde hace casi 12 años, y sabiendo las ventajas que tiene su uso, la estabilidad glucémica que se puede alcanzar (ya no te digo con medidor, además), y la calidad de vida que aporta (aunque sé que eso parece que es discutible), me puse erre que erre hasta que le convencí de que la solicitara... Ahora no se arrepiente, todo lo contrario.
Te enumero algunas ventajas de la bomba, para mí, frente a la terapia de múltiples inyecciones:
1º Te ahorras 11 pinchazos cada 3 días (como encima nosotros apuramos hasta el 4º día, o..., nos ahorramos al menos 15).
2º La programación de tramos de basal diarios y las utilización de basales temporales, es impagable... Con plumas te chutas la basal estés como estés y hagas lo que hagas. Y ya sabemos que los requerimientos basales varían durante el día. De hecho tanto mi marido como mi hija tienen programados varios tramos fijos, y además, usamos muchísimo las basales temporales.
3º La posibilidad de ponerte la insulina de las comidas en forma dual, una parte con un bolo normal, directo, para cubrir los hidratos rápidos o de indice glucémico alto, y otra parte en un bolus cuadrado, es decir, programado para que entre de forma diferida en un tiempo determinado, para que cubra las parte de hidratos lenta, es una de las mayores ventajas que yo le veo a este tipo de terapia, y imposible con pluma, nos pongamos como nos pongamos...
A ver, aunque sé que hay mucha gente que no está de acuerdo con ello, desde la experiencia, yo impondría como terapia única, la utilización de bombas de insulina, para el 90% de las personas con diabetes tipo uno... Me dejo el 10% porque entiendo que para usar bomba de insulina necesitas una serie de compromisos que hay personas que no están dispuestas a asumir, o porque no todo el mundo , desgraciadamente, puede manejarla, a pesar de su sencillo uso. Desde luego, en niños, imprescindible, y cuanto más pequeños, mejor. Ayer estuve con uno de dos años, que debutó con 14 meses y salió del hospital ya con su bomba y su sensor. Sin eso, hubiera sido una absoluta locura... Pues en adultos, exactamente igual.